martes, 26 de agosto de 2014

Vuelta al cole, vuelta al ruedo.

Hola a todos mis lectores y lectoras (que no son muchos, lo sé, pero que los aprecio como un tesoro!)

Bueno, después del saludo halagador, quisiera echar cuentas y veo que hace más de dos meses que no escribo en El Mundo Canica. 

El ser bloguero requiere un esfuerzo de constancia, que puedo asegurar que no es una de mis virtudes. Anica, la Sra. Listas, la de ramalazos obsesivos y controladores, se permite transgresiones con algunas cuestiones de la rutina. Y se le escapan ideas...

Me ocurren muchas cosas a lo largo del día y de repente empiezo a tirar del hilo de la anécdota y pienso que quizás es un buen tema para escribir una entrada en El Mundo Canica, pero luego... como diría alguien a quién quiero mucho-mucho, agua de borrajas. Sí, efectivamente, se queda en nada. Y eso que llevo siempre conmigo un cuaderno y un bolígrafo, como recomiendan los gurús de la creatividad.

Debo confesar que tengo un tema pensado, muy del orden de lo semántico y del juego de las palabras. Pero pretendo darle más cocción y por este motivo, vamos a dejar que se vaya cocinando. En mente está desde hace semanas y como pista os diré que... os vayáis pre-pa-ran-do. 

El verano, las vacaciones ya tienen estas cosas. La vuelta al cole, el inicio de curso, el marcarse objetivos... ¿Acaso no tiene algo que ver con el que retome el blog? Claro que sí! Por estas fechas, a parte de desear intensamente llevarme todo lo que venden en el Abacus y renovar bolis, libretas, tippex, fosforitos, etc. Otra de las ansias que me invaden es la de marcarme objetivos, propósitos. Absurdo me parece enumerarlos, porque siempre son los mismos. 

Eso sí, vengo con las pilas cargadas de buenas intenciones, de ganas de compartir con mi reducido grupo de lectores y lectoras. Así que espero al menos, ir escribiendo alguna cosilla, para que no olvidéis el fantástico, inigualable y especial Mundo Canica.

Un besote