martes, 8 de abril de 2014

Quiero creer


Son muchas las personas que cuando les explico cual es mi trabajo me dicen que no saben como puedo trabajar con situaciones tan duras, que nos admiran por las batallas diarias que tenemos que afrontar. Yo les miro y sonrío. Reconozco que mi parte narcisista agradece estas palabras, me hacen sentir bien. Pero la verdad es que estas batallas no solo se libran con la energía que da el reconocimiento de conocidos, amigos y compañeros.

Hoy me pregunto por qué motivo trabajo en la atención de personas con múltiples problemas médicos, psiquiátricos y sociales. En días como hoy, me pregunto por qué no desistí antes de la búsqueda de empleo como psicóloga social y por qué no decidí dar un giro a mi vida profesional haciendo algún curso de fontanería o carpintería. 

Pero luego me respondo que me gusta mi trabajo porque confío en el ser humano y en la posibilidad del cambio. Puede parecer una paradoja después de varias experiencias que últimamente he tenido en mi día a día, donde observo en las personas con las que trabajo patrones de conducta que se repiten una y otra vez. Por eso, el día a día se afronta gracias a la compañía de otras personas idealistas, luchadoras y cercanas que me guían, me sostienen, me acompañan como parte más de un equipo. Este equipo, al igual que yo, tiene fe en su trabajo. Entonces, es cuando a pesar de las adversidades, quiero creer.

Quiero creer que muchas personas merecen  una oportunidad más.
Quiero creer que hacen lo que pueden pero que pueden integrar que pueden hacer más ( o al menos mejor)
Quiero creer que mi trabajo sirve de algo, ni que sea una sonrisa, una esperanza, un aprendizaje, una opción más.
Quiero creer que no estoy loca por intentar defender lo indefendible, por intentar entender lo incomprensible.
Quiero creer que, a pesar de no conseguir grandes cosas, nuestra labor es positiva. 

Hoy, más que nunca, este deseo de creer va a ser el empuje necesario para aceptar que hay muchas batallas, que no todas las ganamos y no todas las perdemos. 

Os dejo un link a un vídeo que me ayuda mucho en mi trabajo. La tendencia a poner etiquetas no ayuda demasiado a ver a la persona: